Ajoblanco
Ingredientes
Podríamos decir de este plato que es el primo-hermano del tradicional gazpacho, puesto que es la elaboración más cercana de como se preparaban las sopas frías antes de la aparición del tomate proveniente de América.
Hay fuentes históricas que sitúan los orígenes de este plato en las cocinas griegas y romanas. Más adelante la cocina del Al-Andalus, posiblemente, es la que empezó a agregar la almendra en la elaboración de la receta tal y como la conocemos hoy.
Es uno de las sopas frías más autóctonas de la provincia de Málaga, sobre todo por el ensalce de acompañarlo con uvas moscatel, a ser posible de la Axarquía, aunque también es habitual agregar trozos de melón o melocotón. Esta sopa es igualmente tradicional, aunque cada una con su peculiaridad culinaria, en las provincias de Granada, Córdoba, Almería y en algunos puntos de la comunidad autónoma de Extremadura.
Instrucciones
Empapar en agua la rebanada ó la miga de pan.
Machacar en un mortero las almendras, los ajos y la sal. Una vez machacado agregar el pan en remojo y seguir majando.
Agregar el aceite a la masa obtenida en el mortero hasta obtener una pasta homogénea.
Pasar la pasta homogenea a un recipiente más grande para diluirla con el agua. Debe quedar una pasta densa sin ser demasiado líquida.
Agregar el vinagre, rectificar de sal y servir muy frio. Normalmente se suele escoger las uvas como acompañamiento ideal aunque también se prefieren trozos de melón ó de manzana.
Curiosidad
El pueblo de Almáchar es un acérrimo defensor de esta reconfortante sopa fría, tal es así que celebran cada primer sábado de Septiembre la Fiesta del Ajoblanco, designada oficialmente como Fiesta de Interés Turístico en Andalucía.
